Atenti porque la Bolsa sigue con esta bienvenida tradición de mostrar los tesoros de su colección. Seguimos en formato virtual, aunque vale preguntarnos: ¿será la última vez de esta manera hasta que tengamos un segundo brote de covid? Cruzamos los dedos para que la próxima podamos ir hasta el edificio a apreciar las obra en carne viva, en vivo y en directo.
Por lo pronto aprovechamos para chusmear desde nuestros dispositivos, cosa que también es muy divertida. Son 17 obras en muchas de las cuales nuestra ciudad es la protagonista. Hay para todos los gustos pero nosotros hicimos nuestra propio selección; no obstante lo cual recomendamos que ingresen a la web de La Bolsa a navegar por toda la muestra.
Lo que más se repite, y a buena hora, es el viejo puerto rosarino. Julio Vanzo (Puerto) ofrece la versión más abstracta del río y los barcos. Sin embargo las pinturas más acabadas del puerto están materializadas por la mano certera de Luis Ouvrard; que en Puerto y Puerto de Rosario logra generarnos el deseo irrefrenable de tener esas obras colgadas en nuestro living. La primera puede ser que nos remita lejanamente a Quinquela Martin, en tanto que la segunda, con los estibadores en primer plano nos remite a obras de Berni como Desocupados o Los Emigrantes.
Dijimos que el puerto era protagonista, sin embargo lo que más aparece es el río. Preludio Noctural, de Ambrossio Gatti es una obra de arte con todo el peso de la expresión; un pescador en primer plano limpia su pesca a la vera del río, rodeado de canoas, y al fondo, un sol que entrega las últimas luces del día. También Carlos Uriarte repite temática en Caballos en el río, explotando al máximo un hermoso juego de reflejos.
Vanzo, otra vez, con Baile Criollo, de su serie del Martín Fierro nos regala un momento de guitarreada y baile entre gauchos y chinas. En tanto Hugo Ottman nos lleva de viaje al NOA con su Norteño sugestivo, en donde un juego de luces y sombras sobre un caserío colonial genera mucha tensión y misterio propios de la noche y lo que permanece oculto. Casi que es una pieza de suspenso.
En tanto que para los que prefieran la abstracción y lo más surrealista, Carlos Andreozzi nos trae la pintura más volada y terrorífica de la muestra con Mundo irracional.
No se la pierdan, hagan click acá y a disfrutar!!