Rosario no se caracteriza por tener un sinfín de rascacielos, tampoco su superficie vino provista por naturaleza de elevaciones, como colinas o sierras, para darnos la posibilidad de mirarla desde arriba. Pero en Planaxia tenemos algunos puntos estratégicos para ver la ciudad desde lo alto sin necesidad de subirse a un techo, a un dron o salir a pasear en avión.
Si hacemos una suerte de vuelo imaginario por la ciudad vamos a encontrar varios edificios imponentemente altos que tendremos que esquivar como por ejemplo la Torre Maui, en Puerto Norte, que con sus 141 metros es la construcción más alta del interior del país. O sus vecinas, las torres gemelas rosarinas, que nada tienen que envidiarle a la Maui con sus 137 metros. Dato, no opinión: si rankeamos a nuestras embajadoras del espigamiento en el top de los rascacielos argentos vamos a encontrar únicamente esta última entre las primeras 20.
A todo esto, ¿cómo se llaman las torres gemelas: Dolfins, Dolfines o Dolfinas, Delfinas…? Ya será tarea para nuestros sabuesos, quienes irán por un nuevo episodio de “¿Cómo es?” para develarnos este misterio…
Pero adónde íbamos… ah sí, en ninguno de estos casos contamos con miradores o terrazas de acceso público para descubrir los paisajes urbanos desde lo alto… pero tranqui, porque tenemos algunos spots ideales para tirarse unas fotos o selfies, lugares que sí cuentan con acceso publico.
El primero de ellos es un clásico y de abajo hacia arriba tiene un atractivo indiscutible, porque ¿quién no le ha sacado un par de fotos a los Silos Davis cuando ha pasado por la zona?
- Museo Macro (Oroño y el Río)
El museo que está asentado ahí, dentro de los viejos silos Davis, es mucho mas que su fachada. Esta es una doble invitación porque además de acercarles la posibilidad de darse una vuelta y (re)descubrir el Museo de Arte Contemporáneo de Rosario también te incentivamos a que visites los ventanales espectaculares desde donde se puede disfrutar de una vista privilegiada a la zona norte y oeste de Rosario.
Es muy fácil llegar, es de acceso publico -solo te sugerimos que chequees en su cuenta de Instagram los días y horarios- y viene con su 2×1 de calidad Planaxia garantizada. Primero por la recorrida por las distintos pisos del museo y segundo porque tiene una visual zarpada de los ramales que conectan con la estación Rosario Norte. Los ventanales están en la zona de la escalera, en los descansos específicamente.
Y como solemos jactarnos de nuestra generosidad les dejamos otro tip: vayan a la hora de la puesta del sol para robarse unas maravillosas fotos del atardecer rosarino.
- Monumento a la Bandera (Santa Fe 581)
Si hablamos de un clásico, este es el nº1. Pero no nos confiemos porque sabemos que son muchxs los habitantes de la ciudad que nunca subieron al mirador del edificio diseñado por Ángel Guido y Alejandro Bustillo. Por eso quizás sea la hora de tomar ese ascensor y elevarse hasta sus casi 70 metros de altura.
El Monumento Nacional a la Bandera, Inaugurado en 1957, tuvo su marca récord por algunos años siendo su torre el punto más alto de la ciudad, obviamente, un atractivo sin igual porque debe haber sido un flash mirar toda la expansión de una urbe que no tenía hasta ese momento edificios tan altos. Tiene un plus y es que se puede disfrutar una panorámica desde sus cuatros puntos cardinales, en 360°.
Y como en la vida, una de cal y una arena, por el momento coviteano no está permitido el acceso a la torre, pero no desesperen que en algunos meses se reactiva y ¡sale visita!
- Viaducto Avellaneda (Bv. Avellaneda e/ Urquiza y Humberto Primo)
Vamos a decir la verdad, este es el punto menos convencional, pero no íbamos a dejarlo afuera. La no convencionalidad se debe a varios motivos, en principio porque es complejo detenerse a mirar, de hecho si lo quieren hacer tengan mucho ojo donde se van a parar. El bulevar Avellaneda se trepa al Viaducto y se convierte en un puente para observar hacia el centro y el oeste, entonces claro, la opción es una sola, ir a pata. Aunque para los más aventurados y atléticos, la bici está muuuuy bien, sobre todo cuando termina la subida y arranca el descenso envalentonado.
Los laterales del puente tienen una angosta vereda y una baranda, desde ahi se puede observar -en caso de hacerlo hacia el este- el barrio Luis Agote. Si empezamos desde lo que está mas alejado de nuestro ubicación vamos a ver el parque Scalabrini Ortiz (y de fondo la silueta de Puerto Norte); el cruce ferrocarril de calle Salta y su icónico edificio de Telecom; a media distancia los edificios Catamarca 3993, de Gerardo Caballero y Maite Fernández, y el excéntrico Urquiza, de Federico Marinaro. Alejando el zoom, casi debajo nuestro, se pueden ver las canchas del Club Atlético del Rosario.
Ahora, ¿qué pasa si cruzamos de vereda? Canchas de futbol y más canchas de futbol. En orden de aparición: ADIR, Morning Star, Club Deportivo Social Lux y Defensores Unidos, clubes 100 % de acá, canteras en donde patearon algunas figuras locales. Todo esto atravesado por las vías del ferrocarril que van dibujando un mapa hipnótico.
Proponemos este spot porque seguramente muy pocas veces vieron desde arriba una playa de maniobras o los metros y más metros de vías ladeadas por garitas de control, y metros y más metros ocupados por vagones y locomotoras que parecen haber pasado a mejor vida. Las palomas, que vuelan de a cientos, son otro de los atractivos del paisaje. Para los fanás de la fotografía ¡este es su escenario, no los vamos a defraudar!
- Facultad de Humanidades – Nuevo Edificio (Corrientes al 700)
El nuevo edificio de la Facultad, renovadísimo, ofrece una vista inusual a las cúpulas mas celebres del centro rosarino, un paisaje medular de Rosario, el cruce de Corrientes y peatonal Córdoba. Sobre calle Corrientes, este flamante edificio de fachada vidriada y moderna a veces puede pasar desapercibido. Entrá, subí a los pisos más altos y acércate a la salas habilitadas -algunos son salones- en búsqueda del rincón mirador que da a la peatonal. Sobre ese piso de vidrio y ventanales vas a encontrar un vértice en donde está el punto panorámico ideal para degustar de una toma excepcional de las cúpulas de la Bolsa de Comerio y La Inmobiliaria, y también de las fabulosas Mellizas del Palacio Minetti que dan todo su perfil izquierdo y espalda a quien quiera ver.
- Costa Alta y Paseo del Caminante (Av. Carrasco al 4200, foto principal)
Zona norte, ¿qué podemos mirar desde acá? Como bien se anuncia esta zona de barrancas tiene un alto ideal para nuestra misión, pero es pura paradoja porque no hace falta pararse en los balcones de la calle Carrasco porque desde la misma orilla del Paraná se puede lograr lo que vinimos a hacer.
La pasarela del caminante que corre paralela al río nos entrega todo un espectáculo si miramos hacia el centro de Rosario, un regalo del hermoso paisaje costero rosarino. Lo ideal, como dicen los manuales de fotografía, sería aprovechar la luz naranja del atardecer que compone un panorama sin igual. La diferencia con los otros puntos panorámicos es que acá podemos dimensionar la imponencia de la costa rosarina sin tener que elevarnos por encima de la ciudad.